Cuando me quede embarazada, no sabía que hacer, para donde ir.
Fueron momentos duros por la enfermedad de mi pareja. No se puede resumir todo lo vivido. En sentimientos, cariño, malos y buenos momentos; que han sido muchos.
Fue entonces que busque ayuda para mujeres embarazadas en Internet. Vi un teléfono de CRIAME (Centro Riojano de Información y Ayuda a la Mujer Embarazada). Llamé y me atendió una voz en el teléfono que me tranquilizó y vi una luz de poder seguir adelante, porque me hicieron sentir que no estaba sola, y que mi bebé y yo íbamos a estar bien.
Conocí personas con un gran corazón que forman dicha asociación. Así fue como salimos adelante con sus consejos, atención, y ayuda en todo sentido de la palabra.
Mis bebés ya tienen 4 y 2 años, están muy bien, grandes y fuertes.
Y no veo una vida sin ellos.
Mil gracias CRIAME.